Cuando los conocés, wow… el mundo no es tan chico entonces… son iguales a nosotros.
Hablan otro idioma y chapotean el nuestro con encantador acento. Se interesan por nuestras pequeñas vidas tercermundistas y si vas de visita a Amsterdam o Paris, te alojan
en sus casas y te presentan sus amigos. Todos pensamos que las cosas funcionan mal y que no queremos cambiar. Preferimos tener nuestras Topper destrozadas antes que ser esclavos nueve horas al dia para comprar el último modelo ediciónlimitadaintervenidopordiseñadores graficostop de adidas.
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Y vivimos en casas destrozadas, sin pintar y andamos en autos usados porque somos anarquistas y somos freelance y nos da asco trabajar.
Que bien que nos entendemos con nuestros amigos extrajeros! Escuchamos la misma música y salimos de fiesta juntos…
La diferencia es que en algún repentino, incierto momento entre los treinta y cuarenta, todos ellos cazan el pez gordo, se forran de guita y se olvidan de todo. Nosotros nos convertimos en docentes universitarios, empleados públicos o mediocres fotógrafos de circo…
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